Los actos son cada vez más numerosos y de diferente tipo, contra las viviendas lanzando objetos y forzando puertas, robos en viviendas. Son algunas de las denuncias de estos vecinos. También señalan que «perros de razas peligrosas se paseane a sus anchas, algunos de los mismos vecinos, uno con antecedentes por producir una mordedura considerable el pasado verano». También apuntan a «pandillas concentradas en rincones fumando porros, saltando zonas valladas y a pesar de las denuncias, nos sentimos desprotegidos».
Una vecina señala que «el pasado fin de semana, tuvimos que sufrir hasta incendios, queremos recordar el peligro que supone al encontrarnos en una zona de pinada y viviendas en pleno corazón del Vedat». Además, denuncia que «cada vez se asemeja más a una barriada marginal que a lo que en el algún momento de la historia pudo ser esta urbanización».
