Con el arranque de la competición de Valenta Fútbol Base de la Federación Valenciana de Fútbol, el proyecto torrentino de fútbol femenino del Torrent CF y el CEF Hispanic ha efectuado su presentación oficial.
En el partido del día 17 el resultado no ha sido lo importante, pese a la abultada derrota con un único tanto de Marta Lino, lo importante ha sido que las niñas han empezado a coger lo que es el concepto del juego con reglas, ya que son todas nuevas en este deporte.
Toni Jareño director deportivo del Torrent CF y Ricardo Bellver presidente del CEF Hispanic Torrent, equipo femenino de fútbol sala de la ciudad torrentina y que en las últimas seis temporadas ha militado en la división de plata del futsal nacional y que esta temporada participa en liga autonómica con una base de jugadoras de Torrent o vinculadas algunas al fútbol torrentino durante varias temporadas, se reunieron con la idea común de formar un fútbol y fútbol sala base y de iniciación conjunto, para tapar ese vacío que hay en las dos entidades.
Nos remontamos a los inicios del verano y con el centenario de la entidad torrentina en esta temporada, el club se planteó la posibilidad de formar la sección femenina de la entidad, pero el objetivo de su director deportivo Toni Jareño es la de crearlo desde la base y en vías de formación y futuro.
La idea de Toni Jareño al igual que la de Ricardo Bellver es que sea un proyecto unido y que se vaya formando temporada a temporada, partiendo desde edad querubín y haciendo un equipo Alevín Benjamin federado esta temporada, la idea que se plantea es que desde pequeñas las niñas vayan adquiriendo técnica y calidad, buscando dar a las niñas ese refuerzo que les aporte esa mayor calidad en el control y dominio de balón como aporta el fútbol sala.
Ambas partes acordaron formar un proyecto pionero en Valencia, que se sepa no hay ningún club en la provincia que lo tenga, las niñas entrenaran y jugaran a fútbol y fútbol sala, esto permitirá que las niñas aprendan a tener más dominio de balón como sucede en futbol sala, además de adquirir mayor intensidad, velocidad y habilidad con el esférico y a la vez la resistencia y fuerza que ofrece jugar en un campo de fútbol con dimensiones y porterías más grandes, el futbol sala aporta además cierta ventaja, que al jugar con medidas más reducidas y menor número de jugadoras los marcajes son más estrechos buscando mucho el apoyo de la compañera para tapar espacios y robar el esférico sin cometer casi faltas, ya que en futbol sala a partir de la quinta falta se sanciona con doble penalti y no hay fueras de juego por lo que el sacrificio defensivo es de todo el bloque.
Pese a que las reglas son muy distintas en ambas modalidades tanto Ricardo como Jareño están seguros que las niñas irán absorbiendo los conceptos de ambas formas de juego y será beneficioso en un futuro para las niñas, ya que conforme vaya avanzando su aprendizaje y años de practica podrán decidir en qué modalidad se encuentran más cómodas y elegir. El objetivo es que cuando las niñas tengan 11 años, edad de pasar a futbol 11 decidan si prefieren jugar en una modalidad u otra.
El proyecto en su primer año ha llamado la atención y cuentan con un equipo federado de 22 niñas en edad alevín y benjamín siendo prácticamente casi su totalidad la primera vez que juegan, además de otra veintena de niñas en iniciación, incluso hay lista de espera de niñas que quieren iniciarse en el proyecto torrentino, tanto federado como en edad querubín, la intención de ambas entidades es ir formando más equipos federados cada temporada y más categorías para en un futuro poder contar con unos equipos amateur con unas bases sólidas de apoyo y no tener que estar cada temporada haciendo equipos nuevos.
Cabe añadir que las plazas para este proyecto están 100% subvencionadas, lo que demuestra el compromiso de ambas entidades en este objetivo por formar jugadoras.
B. Soler. –
