Torrent ha vivido hoy una de sus tradiciones más arraigadas con la bendición de los gaiatos en la parroquia de San Luis Bertrán. Desde primera hora de la mañana, los torrentinos han acudido en masa para que el párroco bendijera sus gaiatos, comprados en los hornos de la ciudad, en la feria del chocolate, en el porrat de Sant Blai o en la caseta de la Cofradía de Sant Blai. La afluencia ha sido constante y, cada cinco o diez minutos, el párroco ha repetido la ceremonia de bendición mientras los asistentes también aprovechaban para aplicarse el aceite bendecido en la garganta, siguiendo la tradición para prevenir y curar cualquier malestar.

Uno de los momentos más destacados del día ha sido la venta en porciones del gran gaiato de 37 metros, organizado por la Asociación ADISTO de Torrent con la colaboración de IDEAT y el Ayuntamiento de Torrent. Para su elaboración, unos 20 hornos de la ciudad han donado los gaiatos que se han unido hasta alcanzar esta impresionante longitud. Los beneficios obtenidos con este proyecto solidario se han destinado a la Escuela Infantil de Casa Caridad en Torrent.
El gaiato es uno de los símbolos más representativos de Sant Blai en Torrent. Hay variedades para todos los gustos: desde los tradicionales de llavoretes, con una textura similar a la masa de rosquilleta, hasta los dulces decorados con virutas de colores, los de chocolate e incluso los rellenos de nata o trufa, que añaden un extra de sabor a esta delicia festiva.
La festividad de Sant Blai vuelve a demostrar la fuerte identidad cultural de Torrent, donde la devoción y la gastronomía se dan la mano en una celebración que cada año atrae a cientos de vecinos y visitantes.
