El pasado viernes se celebró en el convento de los Dominicos en el Vedat de Torrent, la Eucaristía de despedida del Padre Gerardo.
El religioso dominico padre Gerardo Sánchez Mielgo fallecido a los 82 años. Leonés de nacimiento, destacó por su compromiso con la sociedad civil de Torrent y especialmente con los necesitados.
Acompañado por todos los frailes del Convento y más de 20 sacerdotes de Torrent y que conocían al Padre Gerardo. La ceremonia cantada por el coro de la fraternidad dominicana.
Los múltiples apostolados del Padre Gerardo en la parroquia de la Sagrada Familia (Coro parroquial, visita de enfermos, Misa de 12h los domingos, creación del Camino Neocatecumental en la parroquia, club juvenil, etc.) en el barrio San Gregorio, los grupos de matrimonios y los Hogares de San Martín de Porres y Santa Rosa de Lima, fueron recordados en la ceremonia de despedida, que finalizó con el canto de la Salve Dominicana.
En octubre de 2013, fue nombrado Premi Carta de Poblament de Torrent por la creación de los Hogares de San Martín de Porres, reconocimiento que fue también ampliado en 2017 al ser nombrado Hijo Adoptivo de Torrent por unanimidad de la corporación municipal.
Los vecinos de Torrent pudieron despedirse por última vez tras finalizar la eucaristía, cuando se destapó el ataúd y posteriormente procesión hasta la puerta donde recibió un fuerte aplauso de todos los presentes. Sus restos mortales fueron llevados posteriormente al Cementerio de Valencia donde los dominicos cuentan con un panteón.
Gerardo Sánchez Mielgo nació el 6 de mayo de 1937 en San Feliz de Órbigo (León). A los once años ingresó en el seminario donde estudió Latín y Humanidades y, posteriormente, Filosofía, y fue ordenado sacerdote en 1961. Continuó los estudios de teología a Roma, donde se especializó en Ciencias Bíblicas y obtuvo el título de bachiller en Sagrada Escritura. Seguidamente, estuvo dos años en Jerusalén donde se licenció en Sagrada Escritura. De vuelta a Roma, obtuvo el título de doctor en Teología y fue destinado al convento de la orden de los dominicos en el Vedat de Torrent, momento en que empieza su historia en nuestra ciudad.
