La Policía Nacional y el Ayuntamiento de Torrent han unido esfuerzos para llevar a cabo una formación dirigida a los vecinos en materia de ciberdelitos.
Las charlas informativas, organizadas por la Comisaría Local de Torrent en colaboración con la Unidad de Ciberdelincuencia de la Brigada Local de la Policía Judicial y la Unidad de Participación Ciudadana de la Brigada Local de Seguridad Ciudadana, cuentan también con la participación activa de la Delegación de Participación Ciudadana, accionismo local y procesos participativos del Ayuntamiento de Torrent.
La primera de estas sesiones tuvo lugar el 8 de febrero en el salón de la Casa de la Cultura de la localidad y estuve abierta a la asistencia libre de los ciudadanos interesados que llenaron la Casa de la Cultura. El enfoque de la charla fue eminentemente práctico, abordando los delitos que predominan en la localidad y que afectan principalmente a las personas más vulnerables. De manera ilustrativa y dinámica, se abordaron preguntas cruciales como ¿qué hechos delictivos ocurren en la localidad que pueden afectar de manera directa?, ¿cuándo sospechar?, ¿cómo detectarlo?, ¿qué medidas tomar?, ¿a quién notificar?, y, en caso de haber llegado tarde, la importancia de presentar una denuncia formal.
La colaboración entre la Policía Nacional y el Ayuntamiento de Torrent busca no solo informar, sino también fortalecer la seguridad de la ciudad y prevenir situaciones de riesgo. Se hace un llamado a todos los ciudadanos a participar activamente en estas charlas informativas, reconociendo que la colaboración ciudadana es esencial para construir una ciudad más segura y resiliente ante las amenazas digitales.
La relevancia de estas iniciativas radica en la creciente sofisticación de los ciberdelincuentes y la necesidad de empoderar a los ciudadanos con conocimientos prácticos. Con esta formación, se busca no solo crear conciencia sobre los peligros en línea, sino también proporcionar herramientas concretas para la prevención y la acción efectiva. La seguridad cibernética se convierte así en un eslabón vital para la protección integral de la comunidad, destacando la importancia de la colaboración entre las autoridades y los ciudadanos en la lucha contra los ciberdelitos.
