80 personas participan en el tradicional traslado de la rama de almendro desde la parroquia de San Luis Bertrán hasta la Asunción
Torrent vivió el pasado viernes la Entrada de la Flor, una de las celebraciones con más tradición del catálogo festivo de la ciudad. El ruido y el color de más de 8.000 cohetes llenó la calle de Ramón y Cajal en una noche marcada por un viento muy fuerte que, sin embargo, no impidió la celebración del acto y la asistencia de numeroso público a lo largo del recorrido.
Las celebraciones de la Entrada de la Flor empezaron a primera hora de la mañana. La comitiva de festeros, con los clavarios de este año de la Virgen del Rosario al frente, recorrieron el término municipal para cortar la rama de almendro que por la noche se ofreció en la parroquia de la Asunción. Después los festeros y participantes se reunieron para desayunar y comer en la conocida como la caseta del Rosario.
Por la noche, los participantes se reunieron en la parroquia de San Luis Bertrán, donde empezó el tradicional paseo. Los ruido de los cohetes disparados con tenazas de madera por los clavarios y el resto de participantes -en total, cerca de 80- y la banda de música escoltaron la rama de almendro hasta la parroquia de la Asunción, donde el árbol, que representa la primera flor del año, se ofreció a la Virgen. El acto y la jornada festiva concluyeron con la celebración de la cordà, en la calle de Ramón y Cajal.