Alicia Giner deslumbró esta tarde en la Casa de la Cultura con la presentación de su último libro, «José Luis Osborne Vázquez: orgullo en el alma», sumergiendo a los asistentes en la esencia de la tauromaquia y la trascendencia del apellido Osborne en este universo apasionante. El evento contó con la distinguida presencia del torero valenciano Vicente Ruiz «El Soro» y el concejal de cultura, Aitor Sánchez.
El apellido Osborne, intrínsecamente ligado al toro bravo, se erige como protagonista en la tercera obra literaria de Giner, quien escudriña en el fascinante mundo de la cría de reses bravas a través de la biografía de D. José Luis Osborne Vázquez, fundador de la mítica ganadería. Con un relato que destila esfuerzo, sudor y dedicación constante, la autora revela cómo nuestro protagonista logró esculpir el animal idóneo para la lidia, rebosante de casta y bravura, traspasando así las fronteras estrictamente taurinas para ingresar en el panteón de la leyenda.
La Dehesa de Bolaños, cuna de la ganadería Osborne, fue testigo del nacimiento de magníficos ejemplares que se erigieron como hitos en los ruedos. Regatillo, Atrevido, Aventurero, Arenero, Tramposo, Rayito y Fusilero, entre otros, son nombres que resuenan como sinónimos de singular encaste y excelencia, dejando una impronta imborrable en la historia taurina.
Alicia Giner, una mujer impregnada de la tierra que pisa, realiza un recorrido biográfico meticuloso de D. José Luis Osborne Vázquez. Su narrativa cautiva a los lectores con una mezcla de rigor y amenidad, revelando no solo la travesía del fundador de la ganadería, sino también su propia conexión con el mundo que describe. La autora rinde homenaje al Hierro Osborne, un auténtico emblema nacional de España, a través de una obra que destila amor por la tauromaquia y su arraigo en la cultura española.
En conclusión, la presentación del libro de Alicia Giner se erige como un evento cultural de relevancia, fusionando la pasión por la tauromaquia, la historia de una ilustre ganadería y el legado de un apellido que perdura en la memoria colectiva como símbolo de excelencia taurina.