Estamos en periodo vacacional optando cada uno por un destino vacacional que puede ser la playa, montaña, el pueblo, casa de campo… y todos disfrutamos de tan merecidas vacaciones compartiendo un elemento común: EL SOL.
El sol tiene dos ventajas principales, una estética, ya que desde una perspectiva subjetiva suele favorecer la imagen, puesto que al oscurecer la piel se consigue tonos de piel ligeramente morenos y suelen resultar más atractivos que los colores pálidos y nos vemos como “más guapos”; la otra ventaja y más importante es que el sol es fuente de vitamina D, que es necesaria para la regulación del calcio y el fósforo en la sangre y que curiosamente esta vitamina D se produce cuando la piel absorbe los rayos UV del sol.
Pero el sol también tiene dos componentes muy negativos para la salud: la insolación y el golpe de calor. Parecen lo mismo, pero no lo son. Las insolaciones son la consecuencia de exposiciones prolongadas al sol en condiciones poco seguras (sin protecciones de ropa, cremas, sombrillas, etc.). Las insolaciones nos llevan al fotoenvejecimiento, la aparición de manchas o, en el peor de los casos el cáncer cutáneo y son las consecuencias más graves de la sobreexposición descontrolada.
Los golpes de calor se sufren cuando cambiamos rápidamente de entornos a distintas temperaturas. La temperatura ideal en nuestro organismo debe rondar los 37 grados centígrados; si por cualquier razón sobrepasa los 40 grados y el cuerpo es incapaz de eliminar el exceso de calor, nuestro sistema nervioso comienza a alterarse y aparecen los síntomas de piel enrojecida, caliente, seca, pulso rápido, dolor de cabeza, confusión, debilidad, insomnio, calambres musculares, náuseas, vómitos, convulsiones, pérdida de conocimiento e incluso la muerte.
Por tanto tenemos que tener claro que el sol tiene ventajas pero también inconvenientes que pueden ser muy graves y perjudiciales para la salud. Para evitar problemas y disfrutar de una forma segura, eficaz y fructífera de la exposición al sol, tenemos que atender los siguientes consejos:
• Evitar tomar el sol entre las 12:00 y las 17:00.
• Usar protector solar aplicándolo 30 minutos antes de la exposición y renovarlo cada vez que se salga del agua o se es muy sudoroso. No hay partes menos importantes y proteger todas las partes expuestas.
• Las gafas de sol homologadas y los gorros y gorras deben de usarse frecuentemente y mucho cuidado con los maquillajes con alcohol y los perfumes ya que hacen un efecto “parrilla” en la cara.
• La ropa tiene que ser holgada, ligera y de colores claros puesto que el golpe de calor se da porque la temperatura corporal sube rápidamente y el cuerpo no es capaz de regularla, problema que se agrava si está cubierto por ropas plásticas o ceñidas que impiden la transpiración. También la ropa mojada dificulta la transpiración.
• Hidratación continua: hay que beber mucha agua. Nunca debe ser muy fría y conviene recordar que los refrescos y las bebidas alcohólicas de baja graduación no quitan la sed. En cuanto a los alcoholes de mezclar, se recomienda beberlos razonablemente y cuando se haya ido el sol.
• Evitar ejercicios físicos fuera de casa en horas centrales del dia y con temperaturas elevadas.
FELIZ VERANO A TODOS
Fernando López Monleón
Máster Universitario de PRL