Tras haber permanecido cerrado el cementerio parroquial de Torrent durante todo el Día de Todos los Santos, tras el tiroteo entre dos clanes que se saldó con dos fallecidos y una persona herida, el Cementerio reabrió ayer 2 de noviembre, en el día de los Fieles Difuntos. El día en el que la Iglesia celebra el día de todos los difuntos.
Sin restos del suceso ocurrido en el día anterior y sin las escenas de pánico y terror ocurridas en el día anterior, los torrentinos pudieron asistir a visitar a sus difuntos, un día después.
La Eucaristía que se celebra tradicionalmente en el cementerio el día 1 de noviembre, fue trasladada al templo de la Asunción.