AVA-ASAJA estima que la afección alcanza el 100% en hortalizas y hasta el 80% en caquis, cítricos y frutales de hueso en Picassent, Alcàsser, Llombai y Catadau
Una tormenta de pedrisco descargó con gran intensidad durante la madrugada del sábado al domingo ocasionando importantes daños sobre los cultivos y las infraestructuras agrarias. Según una primera estimación de urgencia de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), la piedra azotó una franja superior a las 4.000 hectáreas de cultivo en los términos de Picassent, Alcàsser, Llombai y Catadau.
El grado de afección es diverso en función de la zona, pero en los peores casos alcanza la totalidad de la cosecha en las hortalizas de temporada y hasta el 80% en explotaciones de caquis, cítricos y frutales de hueso, según advierte AVA-ASAJA. Por su parte, los caquis y los cítricos (mandarinas y naranjas) se encuentran ahora mismo en fase de floración y cuajado de los primeros frutos de la campaña que viene. Del total de la superficie afectada en Picassent y Alcàsser, aproximadamente unas 2.000 hectáreas de caqui y cítricos han sufrido una defoliación importante y el granizo ha causado daños significativos en la madera de los árboles, lo que podría incrementar la caída de frutos en los próximos días.
En cuanto a los frutales de hueso, como el albaricoque, el melocotón o la nectarina, su recolección se halla bastante avanzada y, por tanto, la tormenta merma la producción de aquellas variedades más tardías. Otro cultivo que también se ve afectado es el kiwi, cuyos invernaderos en Picassent ya fueron duramente golpeados durante la borrasca Gloria en el pasado mes de enero. El aguacate es otra alternativa de cultivo con prometedores resultados en términos de rentabilidad que, tras este episodio de pedrisco, también se ha visto afectado.
La tormenta se desplazó de sur a norte, descargando las primeras piedras en los términos de Catadau y Llombai y subiendo hacia Picassent y Alcàsser, donde el granizo formó ríos blancos por las calles del casco urbano.
En cualquier caso, AVA-ASAJA reitera que todavía es pronto para evaluar con más precisión el alcance de los daños, pues hay que esperar unos días para saber el perjuicio perpetrado sobre los caquis y cítricos. La organización agraria solicita a Agroseguro que agilice las peritaciones en los campos siniestrados y a la Administración ayudas fiscales para aliviar las pérdidas sufridas. Siniestros como este ponen de manifiesto la importancia de contratar el seguro agrario. Por ello, AVA-ASAJA reclama un aumento de las partidas presupuestarias que destina la administración a la contratación de pólizas a través de subvenciones.