El premio de la Red Temática de Investigación Cooperativa en Cáncer (RTICC) reconoce el mejor trabajo de Investigación sobre el cáncer en 2014 en España
Romero, que recibió el mismo galardón en 2012, inicia ahora una investigación sobre el cáncer de próstata en California
Su infancia en El Vedat, rodeado de animales y naturaleza, supuso el descubrimiento de su vocación como científico
El biólogo torrentino Octavio Romero Ferraro, ha visto recompensados sus esfuerzos como investigador científico en oncología con el Premio de Investigación de la RTICC 2014 Jóvenes Investigadores, un reconocimiento que ya logró hace 2 años y que supone un paso más hacia delante en su carrera. Este galardón, concedido anualmente por la Red Temática de Investigación Cooperativa en Cáncer (RTICC), reconoce a la mejor Investigación sobre el cáncer en España. De este modo, su trabajo ‘’Investigación del gen MAX en cáncer de pulmón microcítico, alteraciones de los programas de diferenciación celular controlados por BACF y MIC” se ha convertido en un referente científico a nivel nacional. El galardón, que otorga el Instituto de Salud Carlos III, y por lo tanto del Ministerio de Economía y Competitividad, es uno de los más importantes que puede recibir un investigador en nuestro país. La alcaldesa de Torrent, Amparo Folgado, ha recibido al biólogo para felicitarle por el galardón obtenido y mostrar su respaldo, ‘’para la ciudad de Torrent es un orgullo que uno de sus ciudadanos posea esta distinción y compromiso con la sociedad desde la investigación científica de una materia tan sensible como es el cáncer’’, ha señalado la máxima edil.
Desde hace 9 años, Octavio Romero estudia el comportamiento de las células tumorales en laboratorio con el objetivo de extraer conclusiones que sirvan a los profesionales para mejorar la calidad de vida de los enfermos de cáncer. “Para un investigador obtener un reconocimiento por su trabajo es muy gratificante”, explica Octavio Romero refiriéndose a la obtención del premio. Para el joven científico, la labor del investigador debe estar centrada en el compromiso social, recordar el trasfondo social de su trabajo y conservar la sensibilidad es primordial, e incide en que los científicos deberían mantener esa perspectiva, fácil de perder en investigación básica, ‘’los científicos deben trabajar duro para hallar respuestas que permitan mejorar la vida de la gente’’, ha señalado el biólogo. Para él, convertirse en uno de los grandes investigadores españoles en una materia tan sensible y de actualidad como el cáncer no es fácil y conlleva continuar trabajando aún más duro que antes para hallar respuestas.
La investigación galardonada de Octavio Romero forma parte de los trabajos que lleva a cabo el Grupo de Genes y Cáncer del BECBC IDIBELL, sobre cáncer del pulmón y alteraciones genéticas del cáncer. Con este grupo, formado por investigadores nacionales, colaboran también científicos de otros países como Japón o Alemania, entre otros. Todos ellos intentan avanzar en materia de oncología, específicamente en el cáncer de pulmón. “Ya no se miran las moléculas desde un punto de vista académico, sino que se mira si estos fallos pueden ser utilizados como dianas terapéuticas para futuros tratamientos”, ha señalado Romero.
El biólogo torrentino se enfrenta ahora a una etapa profesional distinta, la semana pasada se trasladó junto a su familia a California con el objetivo de participar un el proyecto del centro Sanford-Burnham como investigador asociado a las órdenes del Dr. Jorge Moscat. En esta ocasión su trabajo está centrado en la investigación sobre las hormonas y el cáncer, concretamente en el cáncer de próstata.
Para Octavio, la ciencia no es un trabajo solamente, es una forma de vida y un sueño convertido realidad poder dedicarse a ella. Para este joven investigador, los orígenes de su carrera como biólogo se sitúan en El Vedat, donde desde su más tierna infancia descubrió su vocación en el contacto con los animales. “Era un niño un poco asilvestrado”, confiesa recordando su vida en Torrent. Cuando estudió la célula y los componentes de la vida en los colegios de la zona, su pasión por conocer cómo funcionan las cosas fue aumentando. Nunca se planteó no estudiar biología, siempre tuvo claro lo que quería ser. Y siempre avanzó directo hacia conseguir su sueño, esforzándose en el camino hasta alcanzar el éxito.
Premio de Investigación de 2012 en Oncología.
No es la primera vez que Octavio Romero ve reconocida su labor como investigador, en el año 2012 ya recibió el Premio Nacional de Investigación de en Oncología por la Red Temática de Investigación Cooperativa en Cáncer (RTICC) gracias a su trabajo “El gen supresor tumoral y factor remodelador de la cromatina, BRGI, antagoniza la actividad de MYC y promueve la diferenciación celular en el cáncer humano”