A raíz de la polémica generada por el resultado del período de admisión y de las diferentes faltas de respeto a determinados centros públicos de la localidad, la junta de directores y directoras de la Escuela Pública de Torrent, queremos condenar las numerosas acusaciones injustificadas y los profusos ataques que distintos centros educativos han recibido sin causa.
El período de admisión viene regulado anualmente por la legislación que la administración competente en materia educativa publica en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana y que, de acuerdo con nuestras funciones y obligaciones, debemos hacer cumplir con total objetividad. Es por ello que defendemos y ensalzamos el trabajo realizado por cada uno de los centros educativos de la localidad que estrictamente hemos cumplido con las directrices marcadas por la Conselleria de Educación.
Así mismo queremos destacar el trabajo que la Delegación de Educación de la localidad ha llevado a cabo. Al igual que los centros educativos, la Concejalía de Educación ha seguido las indicaciones que la normativa marca y ha cumplido con los plazos establecidos.
Itaca es la plataforma electrónica educativa que la Conselleria pone al servicio de los centros para su administración y organización. Si la plataforma ha fallado, dicha casuística no está vinculada a nuestra labor; es totalmente ajena a nuestras competencias.
La localidad cuenta con centros educativos con una trayectoria envidiable que apuesta diariamente por la innovación educativa que haga de nuestro alumnado, ciudadanos competentes. Apostamos por una buena educación, invertimos en calidad y trabajamos por y para nuestros alumnos/as.
Tras las distintas farsas y acusaciones, las cuales valoramos como denigrantes, inmorales e intolerables, exigimos una rectificación pues hemos sufrido un ataque al honor y la dignidad de la escuela pública de Torrent que jamás había ocurrido.
Las acusaciones están basadas en palabrerías y no están contrastadas y han dañado la imagen de los centros a los cuales se les ha desacreditado de una forma injusta.
Queremos manifestar que la acción policial se limita, en los centros, a diferentes actuaciones educativas como charlas o simulacros de emergencia.
Desde la junta de Directores y Directoras queremos desmentir que nuestras familias lleven controladores policiales; acusación que catalogamos como deshonroso y calumnioso.
No somos moneda de cambio. Nos sentimos muy orgullosos de nuestro alumnado y de sus familias por lo que no tenemos la necesidad de “sanear”, pues contamos con familias y niños extraordinarios.
En nuestros principios educativos no tiene cavidad el término “gente normal” o “gente anormal”, expresión que definimos como xenófoba y que atenta contra la dignidad y moral de la sociedad torrentina.
En los centros educativos recibimos PERSONAS que buscan la mejor de las enseñanzas y no tenemos, ni pensamos tenerlo, ningún criterio para seleccionar o rechazar personas ya que eso sería anticonstitucional e iría contra la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Velamos por una educación de calidad que cuente con todo lo mejor para tener una enseñanza competitiva; nos sentimos orgullosos de la diversidad con la que contamos. La diversidad es un hecho, una realidad, en la escuela, en la vida. Todos somos diferentes. La escuela capaz de atender la diversidad, es la escuela capaz de atender la realidad de su alumnado, es la escuela que responde adecuadamente a las diversas necesidades y capacidades de sus alumnos y los ayuda, por tanto, a progresar. Atender la diversidad escolar supone valorar y acoger a cada alumno por ser quien es, sin ningún tipo de discriminación por razón de sexo, procedencia, raza, nivel social, sobredotación o discapacidad, en el marco de respeto a los derechos humanos fundamentales. Estamos convencidos de que este es el camino hacia una escuela, una educación, equitativa y de calidad.
Por todas estas razones; porque nos sentimos enormemente entristecidos por los hechos acontecidos; porque se ha dañado el honor y la dignidad la Escuela Pública y sobre todo por nuestros alumnos/as y familias exigimos respeto para toda la comunidad educativa y que se publique íntegramente este manifiesto para poner en conocimiento la veracidad de los hechos y como respuesta para desmontar los injustificados y malintencionados ataques.
Nos gusta como somos y seguiremos defendiendo una educación pública, de calidad y de todos y para todos.
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